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Embajada de Estados Unidos en La Habana.Foto: Yamil Lage/AFP/Getty Images/Archivo
Embajada de Estados Unidos en La Habana.Foto: Yamil Lage/AFP/Getty Images/Archivo

Síndrome de La Habana: ¿qué sabemos hasta hoy?

Por: Marleidy MuñozPublicado: 9 de abril de 2024 - Actualizado: 9 de abril de 2024

Si tienes poco tiempo...

  • Diplomáticos, funcionarios y agentes de inteligencia estadounidenses, y algunos de sus familiares, han sido víctimas de «incidentes de salud anómalos», según lo describe oficialmente el Gobierno de EE. UU.

  • Una reciente investigación periodísticaconcluyó que la inteligencia rusa podría estar detrás del «síndrome de La Habana». El Kremlin lo negó.

  • Aunque se reconoce como el «síndrome de La Habana», además de los hechos ocurridos en Cuba en 2016, existen reportes de incidentes similares en Rusia, China, Colombia, Alemania, Austria, o el propio Estados Unidos, entre otros países.

Diplomáticos, funcionarios y agentes de inteligencia estadounidenses, así como algunos de sus familiares, han sido víctimas a lo largo de varios años de «incidentes de salud anómalos», según lo describe oficialmente el Gobierno de EE. UU.

Lo que también se conoce como «síndrome de La Habana», es un conjunto de síntomas médicos, entre ellos náuseas, mareo, intensos dolores de cabeza y de oído, falta de memoria, sangrado nasal, y fatiga, que se presentan tras supuestamente haber escuchado un sonido agudo. Algunas de las personas afectadas han sido diagnosticadas con «lesiones cerebrales traumáticas» y otros problemas de salud.

Además de los hechos reportados en Cuba en 2016, hay registro de afectaciones similares a funcionarios norteamericanos en Rusia, China, Colombia, Alemania, Austria, o el propio Estados Unidos, entre otros países. Cuando Joe Biden asistió a la cumbre de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) de 2023, en Vilna, Lituania, un funcionario de alto rango también presentó síntomas, según el Pentágono.

El «síndrome de La Habana» se convirtió en un problema de seguridad que involucra a varios países e investigaciones sobre posibles armas secretas de alta tecnología y presuntos ataques de adversarios extranjeros de Estados Unidos.

Una reciente investigación realizada por la revista independiente rusa The Insider, la revista alemana Der Spiegel y el programa 60 Minutos de CBS (EE. UU.), concluyó que la inteligencia rusa podría estar detrás de los incidentes. El Kremlin lo negó.

En la siguiente cronología resumimos varios de los principales hechos e informes asociados al «síndrome de La Habana», un misterio que ya cuenta una década.

2014

Un funcionario de la embajada de EE. UU en Frankfurt (Alemania), cayó inconsciente de forma repentina, sin presentar ningún síntoma previo. Tras un exhaustivo examen médico, el diagnóstico fue: lesión cerebral.

2016-2017

Un año después de que la Administración Obama reabrió la Embajada estadounidense en La Habana, diplomáticos norteamericanos, así como miembros de sus familias, reportaron sufrir mareos, vértigos y dolores agudos en los oídos tras escuchar extraños sonidos. En total, unas cuarenta personas fueron atendidas por esos síntomas.

La agencia Associated Press (AP) publicó la grabación de audio realizada por personal diplomático estadounidense en La Habana, en la que se escuchaba un molesto zumbido agudo semejante al de un grillo. El Gobierno cubano negó cualquier responsabilidad. 

La mitad del personal de la embajada fue retirado y EE. UU. emitió una alerta de viaje a la isla, alegando que sus diplomáticos habían experimentado «ataques selectivos». El entonces presidente Donald Trump expulsó a 15 diplomáticos cubanos de Washington. Se interrumpió el «deshielo» con La Habana iniciado por Obama.

También el gobierno de Canadá indicó que diplomáticos suyos estaban afectados. Al menos 14 ciudadanos canadienses en La Habana reportaron haber sufrido síntomas similares. Tres años después un grupo de estos diplomáticos alegaron en una demanda de 28 millones de dólares en la Corte Federal que el Gobierno canadiense «manejó mal» la situación, y que les indicaron no hablar con nadie al respecto,  informó Global News.

En 2017 Marc Polymeropoulos, un alto oficial de la Agencia Central de Inteligencia (CIA, en inglés), viajó a Moscú, Rusia. El agente dijo haber escuchado en su hotel un sonido agudo y punzante, y después sintió náuseas, vértigo extremo y dolores de cabeza debilitantes que lo obligaron a retirarse en 2019.

Marc Polymeropoulos-CIA

2018

EE. UU. retiró a varios de sus funcionarios de China, tras reportes de «sensaciones sutiles y vagas, pero anormales, de sonido y presión», en la ciudad sureña de Guangzhou. Catherine Werner, empleada del Departamento de Comercio estadounidense, experimentó vómitos, náuseas, dolores de cabeza y mareos durante meses antes de ser trasladada a su país en abril de 2018, según The New York Times.

Catherine Werner

Según una denuncia presentada por Mark Lenzi, otro funcionario estadounidense que residía en el país asiático, «el Departamento de Estado sólo tomó medidas después de que la madre de Werner, una veterana de la Fuerza Aérea, usó un dispositivo para registrar altos niveles de radiación de microondas en el apartamento de su hija. La madre también se enfermó», informó el citado medio. 

Lenzi y su esposa tenían mareos, problemas para dormir y dolores de cabeza, y sus hijos se despertaban con la nariz ensangrentada. Él y su familia fueron evacuados con fines médicos a la Universidad de Pennsylvania.

Mark Lenzi

La Revista de la Asociación Médica Estadounidense reveló en un informe en marzo de 2018, que los afectados presentaban «anomalías cerebrales».

«Estas lesiones, y el tratamiento posterior por parte del gobierno de Estados Unidos, han sido una pesadilla viviente para estos dedicados servidores públicos y sus familias», dijo la senadora demócrata por New Hampshire, Jeanne Shaheen.

En este periodo, las agencias de inteligencia que investigaban los «ataques» que habrían provocado afectaciones al personal estadounidense en Cuba y China, consideraron que Rusia era el principal sospechoso, declararon a NBC News tres funcionarios y otras dos personas informadas sobre la investigación. Las autoridades pensaron entonces que el Kremlin podría estar usando armas sónicas, como en la Guerra Fría.

La antigua Unión Soviética bombardeó la embajada de Estados Unidos en Moscú con microondas durante la Guerra Fría. La Agencia de Seguridad Nacional señaló en 2014 que tenía reportes de inteligencia sobre un país hostil que usaba un arma de microondas de alta potencia para «irradiar las viviendas de un objetivo», causando daños al sistema nervioso. El nombre del país permaneció como información clasificada, pero personas familiarizadas con el documento dijeron que se refería a Rusia, reportó NYT. 

En noviembre de 2018 The New Yorker publicó el artículo The Mystery of the Havana Syndrome, en el que se vinculó a Alejandro Castro Espín, hijo de Raúl Castro y hasta entonces jefe de la Comisión de Defensa y Seguridad Nacional, con los presuntos ataques acústicos que afectaron a diplomáticos estadounidenses y canadienses.

En el texto se señala que el departamento del Ministerio del Interior (Minint) que dirigía Castro Espín, habría sido desmantelado luego de que no se incluyera al hijo de Raúl Castro entre los nominados a sustituir a su padre al frente del régimen cubano.

2020

Un comité de 19 expertos médicos y científicos produjo un informe, a pedido del Departamento de Estado de EE. UU., que indica que los síntomas neurológicos experimentados por los diplomáticos estadounidenses en China y Cuba son consistentes con los efectos de la energía de microondas dirigida.

Según el reporte publicado en 2020 por la Academia Nacional de Ciencias, «en general, la energía de RF (radiofrecuencia) pulsada dirigida, especialmente en aquellos con manifestaciones tempranas distintas, parece ser el mecanismo más plausible para explicar estos casos entre los que el comité consideró».

Estudios de hace más de medio siglo, publicados por fuentes occidentales y soviéticas, «proporcionan un apoyo circunstancial para este posible mecanismo», añade el informe.


Según el reporte publicado en 2020 por la Academia Nacional de Ciencias, «en general, la energía de RF (radiofrecuencia) pulsada dirigida, especialmente en aquellos con manifestaciones tempranas distintas, parece ser el mecanismo más plausible para explicar estos casos entre los que el comité consideró».

Estudios de hace más de medio siglo, publicados por fuentes occidentales y soviéticas, «proporcionan un apoyo circunstancial para este posible mecanismo», añade el informe.

También se señala en el informe que las exposiciones a sustancias químicas, las enfermedades infecciosas y los problemas psicológicos pueden ser causas o agravantes de las lesiones, aunque los expertos no consideran que sean las causas probables.

2021

CNN reportó en abril de 2021 que agencias federales investigaban dos posibles incidentes en suelo estadounidense, incluido uno cerca de la Casa Blanca en noviembre de 2020, de funcionarios con síntomas como los del «síndrome de La Habana».

El incidente que ocurrió cerca del gran terreno ovalado en el lado sur de la Casa Blanca, enfermó a un funcionario del Consejo de Seguridad Nacional, según declararon a CNN «fuentes estadounidenses actuales y anteriores familiarizadas con el asunto».

Otro episodio estaba relacionado con un funcionario de la Casa Blanca que reportó, en 2019, haber sufrido un ataque similar mientras paseaba a su perro en un suburbio en las afueras de Washington, informó GQ, citado por CNN.

En julio de 2021, medios internacionales también reportaron que autoridades austriacas investigaban informes de diplomáticos estadounidenses en Viena, con síntomas  del «síndrome de La Habana». Tras el artículo «Vienna Is the New Havana Syndrome Hot Spot» (The New Yorker) se conoció que se trataba de una veintena de casos.

Viena ha sido durante siglos un centro de espionaje y diplomacia y fue clave en la actividad clandestina de contraespionaje durante la Guerra Fría.


Al mes siguiente de los incidentes en Austria, se retrasó varias horas la salida de la vicepresidenta Kamala Harris hacia Vietnam, después de que su oficina fuera informada por la embajada de EE. UU. en Hanoi de un «posible incidente sanitario anómalo reciente», la forma oficial en que suele referirse al «síndrome de La Habana».

Otro agente de inteligencia estadounidense, que viajó a la India a inicios de septiembre de 2021, reportó síntomas. El oficial era un miembro de la delegación del director de la CIA, Bill Burns, que visitó el país discretamente.

director-CIA

James Giordano, director ejecutivo del Instituto de Investigación en Biodefensa en Washington, y profesor de neurología y bioquímica en la Universidad de Georgetown, declaró a CNN que el oficial había informado síntomas consistentes con el síndrome. Este caso «representa una amenaza clara y actual. Estamos comenzando a ver un patrón de mayor uso selectivo dirigido», dijo.

En septiembre de 2021 The Wall Street Journal reportó que la CIA sacó discretamente de Belgrado, capital de Serbia, a un oficial de inteligencia presuntamente víctima del «síndrome de La Habana». El mismo diario informó que, al menos, otros dos funcionarios estadounidenses en Alemania también desarrollaron síntomas.

Un mes después, más de una docena de funcionarios de la embajada de EE. UU. en Colombia y sus familiares, incluida una menor, reportaron síntomas consistentes con el «Síndrome de La Habana» y fueron evacuados del país sudamericano.

La Academia de Ciencias de Cuba, una institución del Estado cubano, también publicó en 2021 el informe oficial «Una Evaluación de los Incidentes de Salud Ocurridos Durante Estancias en La Habana de Empleados de Gobiernos Extranjeros y sus Familias». En el documento se expone: «Las pruebas utilizadas para apoyar la narrativa del “síndrome misterioso” no son científicamente aceptables en ninguno de sus componentes. Numerosas publicaciones científicas, opiniones de expertos y estudios sobre el terreno en La Habana impugnan o refutan las pruebas presentadas».

Además, los expertos del Gobierno cubano aseguraron que se «descarta la idea del arma de microondas por considerarla incompatible con los sucesos de La Habana y con la ciencia establecida».

Por otro lado, en octubre de ese año el presidente Joe Biden firmó la Ley de La Habana (HAVANA Act of 2021), tras ser aprobada en el Congreso con apoyo bipartidista, que proporciona compensación económica a las víctimas del «síndrome de La Habana».

«Funcionarios, agentes de inteligencia, diplomáticos y personal militar de todo el mundo se han visto afectados por incidentes sanitarios anómalos. Algunos están luchando con lesiones cerebrales debilitantes que han restringido sus carreras de servicio a nuestra nación», dijo Biden en un comunicado.

La senadora republicana Susan Collins, principal autora de la ley, dijo que «para esas víctimas, la Ley de La Habana garantizará que reciban el apoyo financiero y médico que merecen. También afirma nuestro compromiso de asegurarnos de que nuestro gobierno encuentre a los responsables».

2022-2023

A inicios de 2022 siete agencias de inteligencia de EE. UU descartaron en un informe provisional la posibilidad de que se hubiera usado algún tipo de arma o que algún adversario extranjero estuviera detrás del «síndrome de La Habana». 

Dos fuentes familiarizadas con el asunto dijeron que la CIA no había coordinado con la Casa Blanca su decisión inicial de informar al Capitolio sobre sus hallazgos, y que no tomaron en cuenta el trabajo del panel de expertos, reportó CNN.

«La idea de que no existe un Estado involucrado es inexplicable», declaró Marc Polymeropoulos. El ex alto oficial de la CIA,  confesó sentirse traicionado y calificó de «golpe al estómago» el informe de la Comunidad de Inteligencia de EE. UU. 


Marco Rubio, vicepresidente del Comité Selecto de Inteligencia del Senado, rechazó el informe. «Algo sucedió aquí y sólo porque no tenemos todas las respuestas, no significa que no sucedió. No aceptaré que todos estos casos reportados fueron sólo coincidencias», expresó el senador republicano de Florida.

Mark Zaid, abogado de una veintena de personas que reportaron lesiones, señaló: «En tanto no se levante el velo de misterio y se ponga a disposición el análisis que llevó a las conclusiones dadas a conocer este día y quede sujeto a una debida confrontación, las supuestas conclusiones carecen de un valor sustancial (...) Pero el daño que ha causado al estado de ánimo de las víctimas (...) es real y debe ser condenado».

Por su parte, las autoridades cubanas dijeron que los resultados del informe reflejaban lo que han afirmado: que supuestamente no se produjeron ataques.

En septiembre de 2022 CNN informó que un médico de la CIA, que fue una de las primeras personas enviadas a Cuba en la primavera de 2017 para investigar el «síndrome de La Habana», presentó en la isla «el mismo conjunto de síntomas debilitantes», según declaró en su primera entrevista pública al corresponsal médico jefe de CNN, el Dr. Sanjay Gupta.

De acuerdo al medio, más de cinco años después el doctor continuó sufriendo síntomas debilitantes: «Todavía tiene problemas de equilibrio y visión que le han hecho casi imposible operar con normalidad».

Washington anunció la reapertura de su oficina de inmigración en La Habana en agosto de 2023.

2024

Un estudio de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, publicado en el Journal of the American Medical Association, asegura, tras «una serie de pruebas avanzadas», que no hay «traumatismo ni deterioro cerebral en diplomáticos u otros empleados públicos estadounidenses que sufrieron misteriosos problemas de salud» del «síndrome de La Habana», reportó AP.

La pesquisa contradice los hallazgos anteriores que sí registraron lesiones cerebrales en personas que experimentaron lo que el Departamento de Estado llama «incidentes anómalos de salud».

En marzo de 2024 resurgió el debate de qué o quién ha causado el «síndrome de La Habana». En la investigación de los medios The Insider, Der Spiegel y el programa «60 Minutos», del canal CBS, se concluyó que el síndrome estaría «relacionado con el uso de armas sónicas por parte de los servicios secretos rusos».


Según el reportaje, miembros de la Unidad 29155 del Departamento Central de Inteligencia (GRU), un servicio de inteligencia de las Fuerzas Armadas de Rusia, estarían involucrados en los «ataques que causaron dicha enfermedad».


«Durante tres años investigamos esto y finalmente logramos demostrarlo: los mismos oficiales del GRU de la Unidad 29155 que envenenaron a [Serguei] Skripal están paralizando a diplomáticos estadounidenses en todo el mundo con un arma secreta», afirmó en X un periodista de investigación de The Insider, Roman Dobrokhotov. 

«Los rusos utilizan un tipo de arma de energía en forma sónica para atacar la salud de sus enemigos», señala la investigación.

En entrevista con 60 Minutos, Greg Edgreen, teniente coronel retirado del Ejército que dirigió una investigación sobre el asunto para la Agencia de Inteligencia de Defensa, afirmó: «La repercusión en la seguridad nacional de Estados Unidos ha sido que los oficiales de inteligencia y nuestros diplomáticos trabajando en el extranjero están siendo removidos de sus puestos con lesiones cerebrales traumáticas. Están siendo neutralizados».


Una agente del Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés), especializada en contraespionaje, sería otra de las víctimas. Debido a que la mujer sigue en servicio, 60 Minutos la identificó como Carrie para proteger su identidad.  

Según describió Carrie, cuando se encontraba en 2021 en su casa de Florida, quedó desorientada tras sentir una fuerza paralizante que le provocó un intenso dolor en su oído derecho, «como si un dentista estuviera perforando, pero multiplicado por diez». Esto provocó consecuencias a largo plazo en su salud, de acuerdo a su testimonio. 

Olivia Troye, exasesora de seguridad del ex vicepresidente Mike Pence, también relató para la investigación haber sido afectada en 2022 por un ataque similar al de Carrie, pero en las inmediaciones de la Casa Blanca. 

Olivia Troye


The Insider recogió el testimonio de la esposa de un oficial de la embajada de EE. UU en Tbilisi, Georgia, un país exsoviético. En 2020, «Joy» (el nombre no es real) también tuvo los síntomas ya descritos en donde residía. Siguió los protocolos y salió inmediatamente de su casa. En ese momento vio estacionado, justo frente a la ventana del cuarto donde tuvo el primer síntoma, a una persona junto a un automóvil Mercedes Benz del que llegó a tomar una foto y reportó la matrícula. 

Tres años más tarde alguien le mostró una foto e identificó al hombre que vio en Tbilisi, el día en que se produjo el incidente: Albert Averyanov, un presunto agente ruso de la Unidad 29155. De acuerdo con la investigación de The Insider, se trata de un escuadrón cuyo «ámbito de actuación es mundial para llevar a cabo operaciones letales y actos de sabotaje (...) en apoyo de los sueños imperiales de Vladimir Putin».

Reacciones de gobiernos implicados

En respuesta a la última investigación periodística sobre el tema, el Gobierno estadounidense respondió a CBS News, citado por BBC, que «continuarán examinando de cerca los incidentes de salud anómalos». Sin embargo, las autoridades insistieron en que es «muy improbable que un adversario extranjero sea el responsable».

Por su parte Johana Tablada, subdirectora general de EE. UU. de la Cancillería cubana, dijo a la agencia AP que «el síndrome de La Habana no existe, no está en ningún registro de enfermedad, y verdaderamente ha sido el síndrome de Washington desde el inicio».

El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, negó las recientes acusaciones y declaró que la historia no es nueva, ya que no es la primera vez que se vincula el «síndrome de La Habana» con Rusia. «Nadie ha publicado ni expresado nunca ninguna prueba convincente de estas acusaciones infundadas. Todo esto no son más que acusaciones infundadas e injustificadas por parte de los medios», escribió Peskov en redes sociales.


El director de la CIA, William Burns, advirtió en 2021 que los principales servicios de inteligencia de Rusia enfrentarían «consecuencias» si se comprobase que están detrás del «síndrome de La Habana». Por el momento el presidente Joe Biden ha evitado señalar públicamente a ningún país y su administración sostiene que se sigue «investigando el origen de esos incidentes».


Fuentes consultadas

The Insider: Unraveling Havana Syndrome: New evidence links the GRU's assassination Unit 29155 to mysterious attacks on U.S. officials and their families

CBS: Watch 60 Minutes Overtime: "Havana Syndrome"

 CNN:

¿Qué es el "síndrome de La Habana" y dónde se han registrado casos?

Austria investiga informes sobre el síndrome de La Habana entre diplomáticos estadounidenses en Viena

Un posible caso de "síndrome de La Habana" retrasó el vuelo de Kamala Harris a Vietnam

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Funcionarios estadounidenses en Colombia reportaron síntomas del síndrome de la Habana

AP:

Funcionario de EEUU que asistió a cumbre de OTAN presenta síntomas de “síndrome de La Habana”

VIDEO/YouTube: What Americans Heard in Cuba Attacks: The Sound

Cuba: nuevo reporte sobre supuesto síndrome y ataque a EEUU es una “operación política”

The New York Times

U.S. Expels 15 Cuban Diplomats, in Latest Sign Détente May Be Ending

Canadian Diplomats Sue Their Government Over Mysterious Cuban Disease

‘No querían encontrar nada’: diplomáticos afectados por ataques misteriosos luchan contra el gobierno de Trump

Soviet Halts Microwaves Aimed at U.S. Embassy

NBC News:

Cubans Forcefully Reject Blame for U.S. Diplomats' Mystery Ailments

Evacuated after 'health attacks' in Cuba and China, diplomats face new ordeals in U.S.

U.S. officials suspect Russia in mystery 'attacks' on diplomats in Cuba, China

The New Yorker:

The Mystery of the Havana Syndrome

Vienna Is the New Havana Syndrome Hot Spot

National Geographic: Experimentos rusos, la CIA y tensiones diplomáticas: ¿qué sabemos del Síndrome de La Habana?

BBC: El nuevo estudio que vincula a Rusia con el “síndrome de La Habana” (y la respuesta de rechazo de Cuba)

Los Ángeles Times: Estudio no halla atrofia cerebral en pacientes de “Síndrome de La Habana”

América TeVé: EXCLUSIVA:  Ex alto oficial de la CIA: Rusia y Cuba están detrás del Síndrome de La Habana

Telemundo 51: Inteligencia de EEUU no ve señales de ataques de adversarios asociados al “Síndrome de La Habana”

Diario Las Américas: Marco Rubio rechaza informe reciente sobre "síndrome de La Habana"

Global News:Canadian officials warned staff bound for Cuba to stay silent on ‘Havana syndrome’

VIDEO/YouTube/TODAY: CIA Official Teports Havana Syndrome Symptoms During Visit To India

Independenten Español: Agente de la CIA, que viajaba a la India, reporta síntomas del síndrome de La Habana

Infobae: La CIA advirtió a Rusia que habrá “consecuencias” si sus agentes están detrás del “síndrome de La Habana”

Periodismo de Barrio: ¿Qué es y qué dice la Ley de La Habana aprobada por el Congreso de Estados Unidos?

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