Western Union suspende remesas a Cuba: ¿Indefinidamente?

La corporación estadounidense de servicios financieros Western Union (WU) anunció oficialmente el cese de los envíos de dinero desde Estados Unidos a Cuba, tras las sanciones impuestas por la administración de Donald Trump a Orbit S.A., la empresa estatal cubana encargada de procesar una parte de las transacciones en la isla. 

También quedaron canceladas las operaciones de otras agencias que operaban desde EEUU a través de Orbit, subordinada a CIMEX, una empresa del conglomerado militar Gaesa (Grupo de Administración Empresarial S.A.), según una investigación del Miami Herald.  

Los beneficiarios en la isla no reciben el dinero en efectivo, sino en sus tarjetas bancarias en moneda libremente convertible (MLC), la cual, por otro lado, ya no se acepta en varias tiendas estatales en medio del proceso de dolarización “parcial” de la economía, anunciado por el régimen de La Habana.

Tras el anuncio de Western Union la Cancillería cubana publicó en su página oficial que la medida afectaría a “innumerables familias cubanas”. 

Según una declaración de la compañía enviada al sitio digital Café Fuerte, “a partir de este momento, no hay un cronograma para que el servicio hacia Cuba se reanude”.

La empresa multinacional, cuya sede central está en Denver, Colorado, añadió que se encuentra “trabajando activamente con los clientes que tienen transferencias de dinero activas en nuestra red para proporcionar un reembolso del monto total de su transacción. Pedimos disculpas sinceras a nuestros clientes por los inconvenientes”.

La administración Trump reactivó por orden ejecutiva el pasado 20 de enero la llamada Lista Restringida de Cuba, que prohíbe transacciones con empresas bajo el control de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (Minfar) de la isla, y otras autoridades militares del régimen. 

¿A quiénes afecta la medida? 

“Los principales afectados tras la medida serán quienes reciben y envían las remesas, porque aumentaran los costos de envío. También podría afectarse el aparato militar de Gaesa. Pero, en la práctica, creo que la afectación no va a causar grandes estragos porque las remesas llegan a través de efectivo, y de compras en plataformas online, que no son propiamente remesas desde el punto de vista de la contabilidad macroeconómica pero a los efectos de los cubanos funcionan como remesas. Y además, el régimen tiene alternativas a estos espacios para captar remesas, que son Tocopay y Vidaipay,  y que, además, funcionan en el espacio europeo”, advirtió el economista cubano Miguel Alejandro Hayes en declaraciones a Martí Verifica.

El economista Dimas Castellanos también declaró a Martí Noticias desde La Habana que “la suspensión de las remesas afecta tanto al pueblo como al gobierno, pero el pueblo viene siendo afectado por el gobierno durante más de seis décadas y entonces la opción es que hay que salir del régimen actual o viviremos eternamente como sus rehenes, luchando por la remesa para que el gobierno pueda subsistir”. 

En una entrevista de 2022 con la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA), el economista cubano, Ricardo Torrres explicó  que “hay estimaciones que indican que Cuba recibió alrededor de 2-3 mil millones de dólares en 2019. El Havana Consulting Group ofrece cifras similares. A modo de ilustración, con 3 mil millones de dólares, las remesas equivaldrían al 24 por ciento de las exportaciones de Cuba en 2019. Eso las coloca como la segunda fuente más importante de ingresos extranjeros después de los servicios médicos y por delante de industrias importantes como el turismo o la minería de níquel”.  

El experto dijo a la citada ONG, que “si se acepta que las remesas en especie se sitúan en el nivel de 2.500 a 3.000 millones de dólares en 2019, esto sería superior a las importaciones totales de bienes de consumo de Cuba ese año. Esto ayuda a explicar por qué estos flujos son tan importantes, y hasta qué punto el mercado interno cubano se volvió tan dependiente de este dinero”. 

El periodista independiente Osmel Ramírez también comentó a Martí Noticias  desde Mayarí, provincia de Holguín, que ya las personas han “aprendido a recibir y enviar remesas mediante vías privadas. En cada municipio de Cuba, hay decenas de agentes de remesas que usan vías alternativas a través de plataformas en Estados Unidos y negocios que están vinculados entre cubanos allá y cubanos acá y son alternativas que funcionan muy bien, con inmediatez y no media el gobierno en nada, y son tan eficientes que al subir otras posibilidades no llegaron a suplantar estas otras vías”. 

¿Es la primera vez que Western Union cancela las operaciones a Cuba? 

En 2020, durante la primera administración de Trump, la compañía también suspendió sus operaciones entre EEUU y Cuba. En ese momento, la medida estuvo relacionada con las sanciones del Gobierno estadounidense contra la financiera Fincimex, controlada por Gaesa, que era la contraparte de la Western Union en la isla. 

En este contexto, Orbit S. A. fue establecida con la finalidad de sustituir el procesamiento de remesas hacia Cuba. 

Dos años después, en 2022, se restableció el servicio de WU, pero con limitaciones, hasta que se volvió a interrumpir por “problemas técnicos en Cuba”, según declaró la agencia. 

Luego se reanudaron las operaciones en mayo de 2024 hasta ahora que se volvieron a cancelar.

De acuerdo con un informe del economista Emilio Morales publicado por Cuba Siglo 21, en 2024 Gaesa recaudó apenas unos $ 81 millones de dólares en remesas, lo que representa una fuerte caída con relación a las recaudaciones registradas en 2023.

“Algo más del 95 % del flujo de remesas de la diáspora cubana hacia la isla está siendo canalizada a través de una red de más de 150 'bancos informales'. Este fenómeno supone un duro golpe para las finanzas de la élite en el poder, dado que las remesas constituían su segunda fuente principal de divisas”, señala el informe “Gaesa pierde el control de las remesas”. 

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