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Discurso público-Verdadero
Un autobús lleno de pasajeros en Cuba (Ramón Espinosa/AP/Archivo)
Un autobús lleno de pasajeros en Cuba (Ramón Espinosa/AP/Archivo)

DATOS: el transporte de pasajeros en Cuba «está en uno de sus peores momentos»

Por: Ernesto Eimil Reigosa, Yenys Laura PrietoPublicado: 25 de abril de 2024 - Actualizado: 25 de abril de 2024
Qué chequeamos: «Si hablamos de las transportaciones de pasajeros, que es lo que más directamente toca a la población, estamos en uno de los peores momentos de los últimos años».
Fuente: Declaraciones del ministro de Transporte de Cuba en programa Desde la Presidencia
Fecha: 18 de abril de 2024
Esto es verdadero porque...

El contexto actual de escasez de combustible, mal funcionamiento de vehículos y pobre infraestructura vial hace que el transporte estatal de pasajeros no cumpla con las necesidades de la ciudadanía.

Si tienes poco tiempo...

  • En los últimos cinco años, el transporte público en Cuba ha experimentado una disminución significativa en la cantidad de pasajeros transportados. La cifra ha caído de 5.9 millones a sólo 2.7 millones de viajeros diarios.

  • Para ver números tan bajos como estos hay que buscar 22 años atrás.

  • En La Habana, Camagüey y Santiago, por ejemplo, están disponibles la mitad o menos de la mitad de los vehículos

El ministro de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila, expresó (min: 7:09) el 18 de marzo de 2024 en un programa  de YouTube que conduce el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel: «si hablamos de las transportaciones de pasajeros, que es lo que más directamente toca a la población, estamos en uno de los peores momentos de los últimos años».

La afirmación de Rodríguez Dávila es VERDADERA. El contexto actual de escasez de combustible, mal funcionamiento de vehículos y pobre infraestructura vial hacen que el transporte estatal de pasajeros no cumpla con las necesidades de la ciudadanía. Y los números así lo señalan.

Según Dávila, la mitad de las rutas estatales de transporte no tienen un funcionamiento estable. «Una parte de los ómnibus tiene problemas de paralización técnica y otra parte tiene problemas de abastecimiento de combustible», explicó.

Aclaramos que los datos que aquí referenciamos están tomados de la Oficina Nacional de Estadísticas e Información (ONEI), un organismo que responde al Estado cubano. No existen otros datos disponibles para contrastar.

Disminución drástica en el número de pasajeros

Rodríguez Dávila dijo en el programa que, en los últimos cinco años, el transporte público en Cuba ha experimentado una disminución significativa en la cantidad de pasajeros transportados. La cifra ha caído de 5.9 millones a sólo 2.7 millones de viajeros diarios.

Sin embargo, estos son números correspondientes a 2019 y 2022, respectivamente. El encargado del ramo no tomó en cuenta los datos de 2023. Y aunque los números son bastante bajos, el mínimo en cuanto a pasajeros diarios corresponde a 2021, con poco más de 2 millones de viajeros, de acuerdo con la ONEI.

Una de las razones que explican esta caída abrupta de 2021 es la pandemia de covid-19. Aquel año fue el de más impacto del virus en el país, lo que llevó a restricciones de movilidad.

Para ver números tan bajos como estos hay que buscar 22 años atrás. En 2002, sólo 2.6 millones de cubanos viajaron por día.

Díaz-Canel aseguró durante el programa Desde la Presidencia que este año —en al menos 121 municipios de las 15 provincias del país— hay una preocupación importante de la población por la falta de transporte.

En La Habana, de 2500 ómnibus que operaban en la década de los 80, sólo 600 se  encontraban prestando servicio en 2019; en la actualidad, la cifra es inferior a 300 ómnibus para una población de más de 2 millones de personas.

Yunier de la Rosa Hernández, director general de Transporte de La Habana, detalló en el balance anual del Ministerio de Transporte (Mitrans) que los tiempos de espera suelen ser de hasta tres horas en las rutas principales, lo que provoca un creciente malestar entre la población, reportó la prensa estatal el pasado marzo. El funcionario dijo, además, que en estos momentos existen 40 desvíos en las rutas habituales de los ómnibus debido a las malas condiciones de las calles.

En Santiago de Cuba, la segunda ciudad más importante del país, las rutas principales tienen una disponibilidad de 10 ómnibus, de los cuales cinco estaban en circulación. Las líneas alimentadoras contaron con 36 autobuses, pero solamente 18 estaban operativos y las rutas complementarias apenas tenían dos vehículos.

Ante esta situación, las autoridades de Santiago han pedido a las empresas y entidades del Estado que «apoyen» en la transportación de pasajeros. Esto quiere decir que autos con chapa estatal podrían cumplir funciones de taxis gratuitos y recoger a ciudadanos, algo que no siempre se cumple y que es un paliativo que no soluciona la crisis.

Mientras que en la provincia de Camagüey, en octubre de 2023, sólo el 35% de los vehículos de la Empresa Provincial de Transporte funcionaba, debido a la falta de combustible y repuestos. Con esos medios sólo se cubren 32 de las 177 rutas de transporte de pasajeros de la provincia, reportó la oficial Agencia Cubana de Noticias (ACN).

Estos datos, de sólo tres provincias, reflejan una situación grave en el sistema de transporte cubano. 

«Hay comunidades en todas las provincias que no tienen servicios estatales, y otras que lo reciben una vez a la semana o cada 15 días, lo que provocó que la población tenga que acudir, necesariamente, a los transportistas no estatales como única alternativa (...)», explicó Luis Ladrón de Guevara, director de Transportación de Pasajeros del Mitrans.

En tanto, una de las medidas del «paquetazo económico», cuya entrada en vigor fue detenida en febrero pasado tras expresiones de descontento popular, prevé el aumento de las tarifas del transporte estatal.

El Gobierno cubano justifica la crisis del transporte en Cuba, con las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos, así como a la crisis económica mundial y los efectos de la pandemia.

La disminución significativa en la movilidad de pasajeros, la escasez de recursos y los fallos en la infraestructura y los servicios ofrecidos, indican que la situación no parece estar cerca de resolverse.


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