FotoForensics: aplicación para reconocer fotos manipuladas
Si tienes poco tiempo...
Si te animas a subir una foto, te aconsejamos hacerlo con la mayor calidad posible, es decir, con el mayor número de píxeles que puedas. Esto asegurará un mejor resultado a la hora del análisis.
La app nunca te va a decir si la imagen está manipulada o no. La responsabilidad por el uso y divulgación de los análisis recae en los usuarios.
Es muy probable que alguna vez hayas encontrado una foto en internet y hayas pensado: «esto no puede ser real». En este mundo hiperconectado se han hecho comunes las imágenes manipuladas a través de softwares de edición. Lo cierto es que a cada vez más personas les es familiar el término Photoshop, una de esas aplicaciones que te permiten hacer retoques en tus fotografías; y que usan tanto los profesionales como amateurs.
En publicaciones anteriores hemos dado consejos y recomendaciones para identificar imágenes falsas. En esa ocasión abordamos algunas herramientas que te pueden ayudar a saber si lo que estás viendo ha sido adulterado en alguna forma. Hoy retomamos el tema y te daremos una guía para que sepas cómo usar FotoForensics, un programa que te ayudará a combatir la desinformación.
Esta aplicación NO está diseñada para identificar fotos creadas usando la inteligencia artificial (IA), también conocidas como deepfakes, sino más bien imágenes ya existentes que han sido intervenidas.
FotoForensics se define como un sitio de investigación. Cuando estés dentro puedes insertar la URL (dirección) de una imagen o puedes subirla desde tu computadora. Los formatos que admite son .png, .jpeg o .webp, que están entre los más comunes. Una desventaja para fotógrafos profesionales es que no trabaja con .RAW o .TIFF, que son más usuales en cámaras más potentes.
Si te animas a subir una foto, te aconsejamos hacerlo con la mayor calidad posible, es decir, con el mayor número de píxeles que puedas. Esto asegurará un mejor resultado a la hora del análisis. Las imágenes muy comprimidas o provenientes de redes sociales no son óptimas.
Una vez que hayas pulsado alguno de los botones llamados upload verás los resultados. En caso de que quieras determinar si una foto está manipulada o no debes hacer clic en la opción ELA (nivel de análisis de error en español). El ELA es un algoritmo desarrollado por el investigador Neal Krawetz, utilizado para detectar imágenes alteradas.
En la captura superior vemos una imagen que no ha sido manipulada. El ELA muestra un resultado muy uniforme, que indica que es muy probable que no se hayan hecho cambios. Los puntos brillantes (entre blanco y morado) que están presentes indican que probablemente la foto fue guardada muchas veces.
En cambio, en esta segunda imagen observamos que la composición de la foto es irregular, con muchos puntos brillantes alrededor de las zonas que probablemente fueron modificadas.
Esto es probablemente porque los colores fueron modificados para obtener un tono más brillante.
La propia aplicación te da ciertas indicaciones sobre detalles que debes tener en cuenta. Si la imagen está sin retocar probablemente tenga alguna de las siguientes características.
Los bordes de los objetos y su textura deben tener, respectivamente, la misma apariencia.
Los bordes estarán más marcados y las texturas con más detalle tendrán una tonalidad más oscura.
Independientemente del color, toda la fotografía tendrá la misma coloración. Cualquier cambio significativo en estas premisas será un indicador de manipulación de la imagen.
Por otro lado, es fundamental saber que la app nunca te va a decir si la imagen está manipulada o no. La responsabilidad por el uso y divulgación de los análisis recae en los usuarios.
Y aunque parezca algo contradictorio, la descarga de responsabilidad de FotoForensics tiene bastante sentido. Lo que es «permitido» o «verdadero» cambia según a quién preguntes en la industria fotográfica. Por ejemplo, según FotoForensics, es una práctica común en muchas agencias de publicidad hacer grandes alteraciones en las fotografías; los fotoperiodistas, en cambio, suelen hacer pequeños recortes o retoques, probablemente para cumplir con los estándares editoriales de sus medios.
Además, la app te permite conocer los metadatos de las fotografías que subas. Los metadatos es información que guarda el archivo que, en ocasiones, te puede dar pistas de con qué cámara se tomó, en dónde o si fue hecha con algún programa de edición.
Puedes encontrar información adicional sobre cómo interpretar los metadatos aquí. Tutoriales para conocer cómo leer un ELA están disponibles en este enlace. Si quieres repasar los conocimientos adquiridos leyendo las instrucciones básicas de la aplicación, tienes a tu disposición una serie de desafíos para poner en práctica tus conocimientos.
Por último te recomendamos que, aunque esta es una herramienta muy valiosa en tu arsenal contra la desinformación, es mejor que la acompañes con otras, como Google Lens, para contrastar tus resultados. Solo así podrás saber con seguridad si lo que ves es una imagen legítima o si ha sido intervenida.
Fuentes consultadas