¿Qué revelan los datos de la actual zafra azucarera en Cuba?
Si tienes poco tiempo...
Según los reportes oficiales de lo que va de la zafra 2024-2025, esta será otra contienda desastrosa.
Actualmente, los niveles de caña molida apenas alcanzan el 25% de lo planificado.
Además, las autoridades anunciaron en relación con la crisis de la industria azucarera, que serán “redimensionadas 188 bases productivas y se encuentran en proceso de disolución 44 cooperativas”.
De ser una potencia azucarera a nivel mundial, Cuba pasó a registrar en la molienda 2022-2023, la peor zafra de los últimos 125 años.
En 2023, la producción de azúcar apenas llegó a 322.290 toneladas métricas, una cifra 39.62% menor a la alcanzada en 1861 (533.800 toneladas), cuando no existían los centrales azucareros, la caña se cortaba a mano, se trasladaba en carretas de bueyes y el azúcar se obtenía con trapiches, como describe el medio independiente Diario de Cuba.
Según los reportes oficiales de lo que va de la zafra 2024-2025, esta será otra contienda desastrosa.
Actualmente, solo seis de los 14 centrales previstos están en funcionamiento y los niveles de caña molida apenas alcanzan el 25% de lo planificado, publicó el 9 de enero el diario oficial Granma.
¿Cuáles son las causas de la crisis en la zafra, según el oficialismo?
Entre las causas expuestas por la prensa estatal sobre la situación de la zafra, se incluyen principalmente la situación del sector energético que ha provocado retrasos en trabajos de reparación en los centrales, centros de limpieza y talleres de mecanización; así como la escasez de combustible, que ha limitado la capacidad operativa.
Dionis Pérez Pérez, director de Informática, Comunicación y Análisis del grupo estatal AZCUBA, declaró a la prensa estatal que “solo se ha asegurado el 10 % del financiamiento mínimo requerido para llevar a cabo la zafra, lo que pone en riesgo la sostenibilidad del proceso productivo”.
Otro aspecto crítico es la afectación en la entrega de oxígeno, “debido a roturas en la planta y a la falta de materia prima”.
El desastre de industria azucarera
Manuel Marrero Cruz, primer ministro de Cuba, informó en las sesiones del Parlamento realizadas a finales de diciembre de 2024 que “persisten los incumplimientos en las últimas zafras”. Además, reconoció una realidad impensable hace décadas atrás: “hemos tenido que importar azúcar y hemos dejado de exportar este rubro”, dijo, sin ofrecer números.
Según las autoridades, en relación con la crisis de la industria azucarera serán “redimensionadas 188 bases productivas y se encuentran en proceso de disolución 44 cooperativas”.
Marrero Cruz dijo que “se trabaja en un programa para estimular la inversión extranjera en los centrales y en la producción cañera”, con el objetivo de fortalecer la “agroindustria azucarera y derivados”.
Desde las reuniones anteriores de la Asamblea Nacional en julio de 2024, el Doctor en Economía, Pedro Monreal, advirtió en redes sociales: “La recién concluida sesión del parlamento no abordó con rigor el tema de la industria, una de las mayores 'zonas de desastre' del panorama económico cubano, seguramente porque no tienen soluciones efectivas que proponer o aprobar”.
Por su parte, el economista cubano Emilio Morales señaló que “hoy Cuba prácticamente no produce azúcar. Su industria azucarera es un caos. Los pocos centrales azucareros que quedan en activo son chatarra y sus moliendas son profundamente ineficientes. La industria azucarera está literalmente muerta. Hoy el país no exporta azúcar, ahora la importa”.
Según analizó el experto en un artículo publicado en Diario de Cuba, en la pasada zafra solo operaron 23 centrales de los 25 que estaban activos, la mayoría de ellos muy ineficientes, con tecnología obsoleta, con serios problemas de mantenimiento, con problemas de maquinarias, insumos, falta de piezas de repuesto y lo más importante: ausencia de capital financiero para poder resolver todos estos problemas.
“La desaparición de la industria azucarera cubana en los últimos 35 años ha sido evidente (…) Recuperar la industria cuesta ahora unos 10.000 millones de dólares. Sería necesario, además, una reestructuración completa del sector, que incluiría llevarlo a una economía de mercado, con participación del sector privado. Amén de una negociación seria con los propietarios o descendientes de todas las empresas del sector que fueron confiscadas y no pagadas el triunfo de la revolución, para llegar a un arreglo y destrabar toda posible futura inversión en la industria”, concluyó Morales.
¡Conéctate con Martí Verifica! Síguenos en Telegram, Facebook, X y LinkedIn.
Fuentes consultadas
Diario de Cuba
Granma
Análisis de los economistas Pedro Monreal y Emilio Morales.
Textos y videos anteriores de Martí Verifica.